A la cantante Beyoncé se le llena la boca de orgullo cada vez que habla sobre su ciudad natal, Houston (Texas), de modo que no es de extrañar que, de poder invertir en cualquier equipo de la NBA, la diva haya apostado por hacerlo por el más famoso de la capital tejana, los Houston Rockets, a cuyo pabellón ha acudido en numerosas ocasiones junto a su marido Jay Z.
Hasta ahora, los Rockets eran propiedad del empresario Leslie Alexander, quien hace un par de semanas anunciaba su decisión de vender el club que en 1993 compró por 85 millones de dólares y que actualmente está valorado en más de 1000 millones.
Según un informe publicado por el medio económico Bloomberg, el inesperado anuncio de Alexander atrajo en seguida el interés de posibles inversores -entre ellos el de la propia estrella del pop -que estarían encabezados por un socio principal con responsabilidades tanto financieras como de gestión.
Publicidad
En el caso de confirmarse que la cantante ha comprado un pequeño porcentaje de las acciones, su implicación en esta sociedad comanditaria se reduciría únicamente al desembolso del capital comprometido y, evidentemente, a la recepción de los consiguientes dividendos.
Por otro lado, no cabe duda de que asociar la franquicia a la imagen de una intérprete de su talla dotaría al equipo entrenado por Mike D'Antoni de mayores niveles de notoriedad y prestigio en el exterior. En ese sentido, el mismo medio recuerda que Beyoncé es una de las celebridades actuales que más influencia ejerce sobre chicas jóvenes de entre 13 y 17 años, además de ser una de las más seguidas en Instagram con 105 millones de seguidores.
Publicidad
¿Un millón de dólares? Cada publicación de Beyoncé en Instagram vale una fortuna
Además de encontrar en su marido, el rapero Jay-Z, el mejor acompañante con el que disfrutar de un buen partido de basket, la popular artista también podría recurrir a él para conocer de antemano lo que significa ser propietario de un club deportivo. Hace unos años, el músico invirtió parte de su fortuna en los Brooklyn Nets de Nueva York, aunque acabó vendiendo sus acciones años después para ganar liquidez y establecer así su compañía discográfica Roc Nation.