Nelly y Fabiola son secuestradas por parte del narco para el que trabajaron cuando son interceptados por el Ejército. Sin embargo, Fabiola se arma de valor para golpear al hombre con un tronco y lo deja inconsciente, dándoles el tiempo suficiente para escapar.
Años más tarde, Fabiola ya es mamá de un pequeño, fruto de su relación con Lorenzo, y lo cuida con ayuda de Tulia. Mientras que el matrimonio de Nelly ya no tiene arreglo y Julián termina yéndose para Estados Unidos.