El género 'Grunge' se comenzó a cotizar a lo largo de los años como un género que apelaba mucho a la emotividad de sus artistas, y aunque no era de gran manera, sus letras daban a entender que había un transfondo en lo que vivían interiormente como seres humanos y la inconformidad con el comportamiento de los demás.
Algunos de ellos recurrieron a las drogas como una motivación para poder componer, interpretar y hasta cantar sus canciones. Sin embargo, no midieron las consecuencias de sus acciones y terminaron perdiendo la vida, ya sea por voluntad propia o por muerte instantánea, estos personajes muestran que la vida del músico puede llegar a ser demasiado complicada y que hay que llevarla de una mejor manera.
A los 41 años, muere Chester Bennington, el gran vocalista de Linkin Park
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