Basilia Colorado es una mujer afrocolombiana de 57 años nacida en Guapi, Cauca, a pocos kilómetros del Océano Pacífico, y su historia es una muestra del poder de la perseverancia. Desde muy joven, esta caucana entendió que los sueños no se alcanzan de la noche a la mañana, pero con decisión y esfuerzo son posibles."Ha sido un anhelo de mucho tiempo. Yo he pagado arriendo durante 26 años y ahora ese dinero se transformará en la cuota de mi apartamento", comenta con una sonrisa.Su camino no ha sido sencillo. A los 15 años dejó su hogar en la vereda El Rosario para buscar nuevas oportunidades. Aunque extrañaba su vida en medio de la naturaleza, nunca perdió de vista su objetivo: tener una vivienda propia. Ese anhelo tomó forma cuando conoció el programa AhorraCasa de Compensar, que le brindó las herramientas necesarias para organizar su economía y comenzar a construir su futuro."Un día me llaman y me dicen que hay un proyecto llamado Cantoval en Lagos de Torca y que tengo prioridad para conocerlo. Fui a la reunión, me encantó lo que vi y decidí iniciar el proceso de compra", recuerda con emoción.Mira también: Casa propia a los 20 años: esta es la historia de Brayan Andrés Fresneda y su familiaGracias a su disciplina financiera, el acompañamiento del programa de AhorraCasa y el subsidio de vivienda Compensar, Basilia logró reunir el dinero para la cuota inicial. "Ese ahorro fue clave. Lo hice pensando en uno de mis grandes sueños y ahora estoy viendo cómo se vuelve realidad", afirma.Para ella, Cantoval representa seguridad, independencia y un entorno que refleja lo que siempre soñó."Lo que más me gustó es que tiene buena vista, una montaña hermosa, buenas vías, está cerca de la Séptima y la autopista y hay buen transporte", señala con entusiasmo.Además de los apoyos relacionados con su nuevo hogar, Basilia recibe de Compensar un subsidio económico que destina a sus padres como muestra de gratitud y compromiso con sus raíces.Como ella, en 2024, la plataforma de bienestar integral apoyó a más de 1.700 personas, que iniciaron su camino hacia una vivienda propia a través de AhorraCasa, demostrando que, con compromiso, planificación y esperanza, los sueños sí se cumplen.“A quienes escuchan o leen mi historia, les digo: tengan un objetivo claro y trabajen con dedicación. Cuando uno se compromete de verdad, todo es posible”, concluye con orgullo.
Iliana y su familia llegaron a Colombia después de haber vivido varios años en Ecuador. Junto a su esposo, Henderson Cuevas, trabajaron en un emprendimiento de churros y micheladas, pero la distancia con sus familias en Venezuela se hizo insostenible. Decidieron regresar a su país natal y luego viajar a Colombia, donde comenzaron de cero.En Bogotá, enfrentaron las dificultades de ser extranjeros: duraron días durmiendo en el terminal de la ciudad, luchando con la incertidumbre y el cansancio. Iliana recuerda cómo su hijo, agotado, le decía: "Mami, estoy cansado, me duele la espalda, me duele la cabeza, ya no quiero dormir más en la calle". Esas palabras la destrozaban, pero, a pesar del dolor se mantenía firme, sabiendo que debía seguir adelante por su familia.La ayuda llegó cuando encontraron refugio en la Fundación de Atención al Migrante (FAMIG). Allí, recibieron apoyo emocional, psicosocial y un lugar seguro para empezar de nuevo. "Ahí en la terminal nos indicaron sobre la fundación de ellos, y fuimos hasta allá. Nos acogieron, y pues, por ahora estamos ahí", dice Iliana con entusiasmo, agradecida por la oportunidad. Para su esposo, Henderson, este apoyo ha sido fundamental: "Nos ha abierto las puertas sinceramente, no solo a mí, sino a todos los compañeros de la fundación", afirma.Además, Iliana y su familia fueron integrados a una iniciativa que busca fomentar la inclusión y el bienestar integral de la población migrante en Bogotá a través del deporte y el apoyo psicosocial. Más de 120 migrantes han participado de este programa, liderado por Compensar, en alianza con la Asociación Internacional del Deporte y la Cultura (ISCA) y el apoyo de FAMIG.Uno de los principales objetivos de la iniciativa es brindar a la población migrante un espacio seguro donde puedan conectarse con otros, reducir el estrés y fortalecer valores esenciales como la resiliencia, el trabajo colaborativo y la disciplina, fundamentales para su proceso de adaptación.El sueño de Henderson es tener estabilidad para su familia, especialmente para sus hijos. "Quiero que todos estemos bien, que tengamos un futuro estable", asegura. Mientras tanto, Iliana también anhela un futuro mejor, lleno de experiencias y seguridad.Iliana y Henderson reflejan la determinación y el coraje de los migrantes que, a pesar de los obstáculos, no pierden la esperanza de un futuro mejor. Gracias al apoyo de iniciativas como las de Compensar y FAMIG, cada paso hacia adelante se convierte en una oportunidad de renacer, de creer en un mañana lleno de posibilidades.
Luis Alberto es un claro ejemplo de que, sin importar el obstáculo, la vida continúa, y la forma en que decidimos afrontarla puede marcar la diferencia. Aunque hace 12 años un diagnóstico le dio a su vida un giro inesperado, su camino no se detuvo. "La vida tiene que seguir, llámese párkinson o llámese la enfermedad que sea", afirma con determinación.Una de las decisiones más significativas para él fue incorporar la actividad física a su vida diaria. Desde la apertura del Centro de Bienestar Integral Carrera 60 de Compensar, se convirtió en uno de los primeros miembros. "Soy de los que inauguraron el centro hace un año, y ha sido la mejor solución que he podido encontrar", expresa con entusiasmo.En este espacio, descubrió el ejercicio físico como una herramienta clave, además de otras actividades para entrenar su mente y mejorar su motricidad, como la sala de estimulación sensorial y las actividades ocupacionales. La cocina y la música, especialmente el teclado y la guitarra, han sido fundamentales para mejorar su bienestar cognitivo y emocional.Esta experiencia lo llevo a agregar a su filosofía de vida una efe adicional a las que ya tenía claras. "Yo me fijé la meta de las 3 efes: la primera f de fe porque siempre tenemos a un ser superior que nos guía, la segunda de fortaleza física, la tercera de fortaleza mental. Y aquí en el CBI me enseñaron la cuarta, que es la que más estoy aplicando, la f de felicidad”, explica con certeza."Lucho", como cariñosamente le dicen, es uno de los más de 4.500 usuarios que han participado en los programas especializados para la persona mayor. Gracias a estas iniciativas, ha logrado mantenerse autónomo y, al mismo tiempo, aprender a disfrutar de las pequeñas cosas de la vida."Mi nieta dijo que quería ser pensionada como yo, porque disfruto la vida haciendo lo que me gusta", comenta, insistiendo en que la felicidad es uno de los pilares de su vida.Este esposo, padre y abuelo, es un claro ejemplo de que la voluntad y el amor por la vida pueden superar cualquier adversidad. Su historia es un recordatorio de que, independientemente del diagnóstico, siempre hay espacio para la esperanza, el disfrute y el crecimiento personal. "La vida sigue. Tienes que trabajar para vivir y disfrutar cada momento", concluye, reflejando la filosofía que ha hecho de él un hombre lleno de vitalidad y alegría.
Leila Victoria Gómez ha encontrado en el deporte y la resiliencia una herramienta poderosa para transformar su vida. Tras perder su hogar en Bogotá por problemas hipotecarios, vio en el megaproyecto de vivienda Hogares Soacha, de Compensar, una oportunidad para comenzar de nuevo."Para mí fue un renacimiento, encontrar algo nuevo, novedoso y muy lindo. Hoy me siento feliz de estar en Soacha", comparte Leila sobre este nuevo capítulo. Aunque los primeros días fueron desafiantes, pronto halló en el deporte un espacio de integración y crecimiento personal.Desde niña, el deporte ha sido su refugio. La ciclovía y el patinaje marcaron sus inicios en la actividad física y, a sus 60 años, sigue inspirando a quienes la rodean. "Para mí, la edad es solo un número. No me define lo que dice mi cédula, y eso hace que la gente se sorprenda y diga: ‘Si ella lo hace, ¿por qué yo no?’", expresa con convicción.Uno de los pasos clave en su adaptación fue unirse al Programa de Desarrollo Social Comunitario de Compensar. Allí, en los entrenamientos del conjunto residencial, conoció a su profesora Paola Cano, quien la impulsó a seguir adelante. Además de mantenerse activa, encontró en la comunidad un espacio donde compartir su pasión por el bienestar.Su liderazgo en el ámbito deportivo ha sido ampliamente reconocido a lo largo de los años. Gracias al programa, ha adquirido herramientas clave, incluido un diplomado en actividad física, que le ha permitido liderar clases y fomentar el bienestar en su comunidad. Uno de sus mayores logros ha sido la creación de los "rumberos", un grupo de adultos mayores que encuentran en la música y el movimiento una forma de mantenerse activos y disfrutar la vida."Leila es una líder deportiva, lleva un largo camino con nosotros y ha replicado todo lo aprendido en su comunidad", destaca Luisa Fernanda Ruiz, del Programa de Desarrollo Social Comunitario de Compensar. Su compromiso no solo transformó su vida, sino que también ha motivado a otros a convertirse en agentes de cambio.Más allá del ejercicio, lo que realmente la llena de orgullo es servir a los demás, compartiendo su amor por la salud física y mental. "Bienestar es lo que siento ahora: tranquilidad, paz y armonía entre cuerpo y mente. Lo encuentro cuando me capacito, ayudo y sirvo a los demás", afirma con humildad.Con la mirada puesta en el futuro, tiene una meta clara: mantenerse independiente y en plenitud con el paso del tiempo. "He visto videos de personas de 80, 90 o incluso 100 años que siguen siendo autónomas, y esa es mi inspiración. Esa es mi meta", concluye con la misma determinación que la ha acompañado siempre.Leila es la prueba de que la edad no es un límite, sino una oportunidad para seguir aprendiendo, creciendo y demostrando que el bienestar es posible en cualquier etapa de la vida.
Emelina, originaria de Guatavita, Cundinamarca, recuerda su infancia marcada por las escasas oportunidades de aprendizaje. "En mi infancia estudiaba, pero no aprendí a estudiar porque la profesora era una señorita que se iba para la calle y no nos hacía mucha clase", comenta.A pesar de estos retos, su vida dio un giro cuando su hermana la animó a unirse al programa "Fundadores de Vida" de la Red de Solidaridad de Compensar y la Fundación Niño Jesús. "Mi hermana vino y me dijo que había una fundación que si nos matriculábamos, nos enseñarían algo", recuerda Emelina. Este fue el inicio de un camino que le permitió hacer nuevas amistades, aprender habilidades y, lo más importante, encontrar el amor.Por su parte, Hernán, quien nació en La Palma, Gámbita, Santander, también enfrentó adversidades desde joven. En su infancia, el trabajo arduo y las enseñanzas sobre la honestidad fueron fundamentales, pero la vida en el campo le limitó el acceso a muchas oportunidades. "Nunca conocí un color. Vine a conocer los colores y el lápiz aquí", asegura con nostalgia.Gracias al programa de la Red de Solidaridad de Compensar, que promueve la inclusión y la integración, en la Fundación Niño Jesús, Hernán encontró la oportunidad de explorar nuevas habilidades, incluyendo el arte. "Lo quieren a uno mucho esas profesoras, el profe es como si fuera el papá de uno", afirma con cariño.A través de este programa, más de 400 personas mayores en situación de vulnerabilidad pueden disfrutar de una vejez más feliz y activa. Hernán y Emelina son dos de esos beneficiarios, y lo que comenzó como un espacio para aprender y compartir, pronto se transformó en una historia de amor.Emelina no podía imaginar que ese hombre, que le ofreció dulces y comenzó a conquistarla con su humor y encanto, sería el compañero con quien compartiría el resto de su vida. "Ella me gusta porque es muy juiciosa. Siempre está ahí para ayudarme. Me ve como un niño pequeño, algo que nadie más hace. Ni mis propios hermanos", señala Hernán, sonriendo con ternura.Hoy, ambos caminan juntos, demostrando que nunca es tarde para el amor. "Que sigamos los dos como estamos ahora, sin problema ni nada", expresa Emelina. Su historia es un testimonio de que el apoyo comunitario, el aprendizaje y, sobre todo, la voluntad de volver a empezar, pueden transformar vidas en cualquier momento.A través del programa “Fundadores de Vida”, Hernán y Emelina demuestran que siempre hay una oportunidad para un nuevo comienzo, independientemente de la edad o las circunstancias de la vida.
Desde su vida en Venezuela, Paola Cantillo guarda con cariño los recuerdos de los momentos compartidos con su familia, especialmente durante las celebraciones de Carnaval y Semana Santa. Esas memorias de unidad y amor familiar la acompañan todos los días, mientras avanza en un camino que la llevó a dejar atrás sus estudios en higiene y seguridad laboral, buscando un futuro mejor para ella y su familia.“Mi mamá lo es todo. Como siempre le digo, ella es la luz que ilumina mi vida. Soy lo que soy gracias a ella. Vine con el objetivo de ayudarla a mejorar su hogar, porque en Venezuela la casita que tenemos es de machimbrado y cuando empieza a llover, se inunda. Mi sueño es poder arreglarla o comprarle una casa nueva”, comenta Paola con nostalgia.Tras cruzar la frontera hacia Colombia por una trocha, Paola se instaló primero en Riohacha. Allí vivió tres meses antes de mudarse a Bogotá, a donde llegó en busca de nuevas oportunidades laborales. A lo largo de estos años trabajó en diferentes oficios: desde mesera hasta en cafeterías y panaderías, desempeñando roles de atención al cliente.Sin embargo, su vida comenzó a cambiar cuando decidió dar un paso hacia el empleo formal, fue entonces cuando descubrió el Programa de Inclusión Laboral de la Agencia de Empleo Compensar. Gracias a esta iniciativa, Paola encontró una nueva oportunidad para acceder a un trabajo con todas las garantías legales.“Fui a la Fundación Juntos se Puede y ellos me enviaron a la agencia de Compensar. Me recibieron, me hicieron una entrevista y luego me agendaron para una capacitación. Realicé dos días de formación: un día virtual y otro presencial. Después me dijeron que tenía que esperar, pero cuando finalmente recibí el mensaje para presentarme a la empresa, todo cambió. Pasé por la capacitación, los exámenes, la firma del contrato y ahí comenzó mi empleo formal”, explica Paola con gratitud.El camino no ha sido fácil, pero Paola ha demostrado una gran capacidad de perseverancia. En momentos de incertidumbre, cuando la desesperación la invadía, nunca dejó de confiar. Hoy, con su empleo formal puede sostener a su familia.“Este es mi primer trabajo formal, con prestaciones y todo. Siempre hice planes, sabía que alguien me iba a recibir aquí, pero también sabía que debía ser independiente. Alquilé una habitación, viví sola, luego se vino mi hermana y, más tarde, alquilamos un apartamento donde ahora vivimos con mi mamá. La traje para estar juntas. Uno tiene que ser perseverante, no desanimarse y siempre confiar en Dios”, señala Paola con una sonrisa.Con esfuerzo, disciplina y fe, Paola sigue adelante. Su historia es un testimonio de que, aunque emigrar implique sacrificios y renuncias, las puertas que se abren pueden ser el inicio de una nueva vida. En sus propias palabras: “Uno tiene que ser perseverante, no desanimarse y confiar en Dios”.Gracias a iniciativas como el programa de Inclusión Laboral de Compensar, a la fecha más de 4.000 migrantes han recibido apoyo con el Programa de Inclusión Laboral de la Agencia de Empleo de Compensar, que beneficia, además, a víctimas del conflicto armado, reincorporados, personas con discapacidad y población LGBTIQ+. Paola, con su dedicación y esfuerzo, sigue siendo un claro ejemplo de que, a pesar de las dificultades, quien persevera, alcanza.
Brayan Andrés Fresneda tiene 20 años y ya cuenta con su casa propia. Para él, este logro es casi un milagro, pues sabe que es un paso que la mayoría de los jóvenes de su edad aún no se atreverían a dar. En su comunidad de Carmen de Carupa, ubicada a 100 kilómetros de Bogotá, la idea de tener una vivienda propia tan joven es vista como algo poco común.Aunque nació en Ubaté, Brayan creció en una finca familiar en Carmen de Carupa, un lugar donde el cultivo de papa, quinua y el trabajo en el campo son el pan de cada día. Su vida cambió drásticamente tras la muerte de su padre, quien, antes de fallecer, le dejó una pensión de supervivencia y la afiliación a Compensar, lo que le permitió acceder a recursos para mejorar su situación.Conoce más: Cindy Nataly Gaitán: una madre luchadora con ganas de volar cada vez más altoCon la orientación de su madre, quien recibió información sobre el subsidio de Construcción en Sitio Propio de Compensar, Brayan comenzó el proceso para acceder al beneficio. A través de Internet, completaron los trámites necesarios y, tras superar dos filtros administrativos, logró obtener el subsidio. Esto le permitió avanzar con la construcción de su futuro hogar en el terreno que él ya poseía.El acompañamiento de Compensar, según Brayan, ha sido clave para el proceso: "Cada 15 días, un equipo de la caja de compensación supervisaba el avance de la obra, asegurándose de que todo estuviera en orden". Aunque la casa aún no está terminada, ya cuenta con dos pisos, y Brayan no ha dejado de soñar. Lee también: El sabor del éxito: Lilia Medina y la historia de su gran legado familiarEl subsidio de Construcción en Sitio Propio de Compensar está diseñado para apoyar a propietarios de terrenos rurales o urbanos que cuentan con los ahorros necesarios para llevar a cabo la obra. En 2024, la caja destinó tres mil millones de pesos a la adjudicación de subsidios, ayudando a jóvenes como Brayan a dar un paso hacia la estabilidad.Además de su casa, Brayan tiene grandes sueños. Su meta es terminar de estudiar su carrera, ingeniería agronómica, convencido de que el campo ofrece grandes oportunidades para quienes deciden apostar por él. "El campo es todo, y es una fuente de ingresos para muchas personas", asegura con firmeza.Finalmente, Brayan se ve viviendo en su hogar, trabajando en lo que le apasiona, ayudando a su familia y recorriendo los rincones de Colombia. "Agradezco profundamente a Compensar, a mi mamá y a mi abuela por su apoyo en este proyecto de vida", concluye, con una sonrisa llena de esperanza.
Cindy Nataly Gaitán, una joven bogotana de 26 años, logró transformar una de las experiencias más desafiantes para más de 2.1 millones de colombianos: el desempleo. Gracias al subsidio de desempleo de Compensar, esta madre dedicada no solo encontró alivio para enfrentar sus responsabilidades económicas, sino que también rediseñó su futuro laboral con el respaldo de la agencia de empleo de esta organización.Mira también: Rompiendo barreras: Henry, un ejemplo de superación y determinación a través del deporteCindy forma parte de las más de 23 mil personas que han recibido el subsidio de desempleo de Compensar, un apoyo que, además de ofrecer un alivio económico, garantiza durante seis meses acceso a salud y ahorro a pensiones. A través de su agencia de empleo, Compensar complementa este beneficio con asesoría personalizada, acompañamiento constante y capacitación integral para que los cesantes puedan encontrar nuevas oportunidades y fortalecer sus habilidades profesionales.“Una psicóloga de la agencia de empleo de Compensar me contactó para ayudarme a estructurar mi hoja de vida y prepararme para entrevistas. También me brindaron la oportunidad de explorar un campo laboral diferente al que había trabajado antes”, cuenta Cindy. Este acompañamiento fue crucial para que se vincule a una empresa que, antes de incorporarla formalmente, le ofreció formación técnica en mercadeo y ventas, potenciando sus competencias.Te puede interesar: La receta para un futuro mejor: el legado de amor y esperanza de Yaneth Gutiérrez en SumapazPara Cindy, el proceso significó mucho más que estabilidad económica; representó tranquilidad emocional y personal. “Lo que más agradezco es poder estudiar desde casa y estar presente para mi hijo Tiago, que está en pleno crecimiento. Esto me motiva a seguir adelante y aprovechar cada oportunidad”, reflexiona.Con el respaldo del subsidio de desempleo y la agencia de empleo de Compensar, Cindy no solo encontró un apoyo vital en momentos de dificultad, sino que también construyó un camino hacia nuevas posibilidades que le permiten mirar el futuro con optimismo y determinación.
Desde sus inicios, Lilia Medina ha sido testigo de los desafíos que implica emprender. Con un molino casero, una pequeña parrilla y un enorme deseo de sacar adelante a su familia, comenzó a vender arepas en su barrio. "Yo misma iba, hacía las arepas, empacaba, entregaba los pedidos en bus, regresaba y seguía trabajando", comenta. Así, paso a paso, con esfuerzo y sacrificio, su negocio fue creciendo.De esta manera nació 'Masarepa Lilia', una empresa que fabrica mucho más que arepas. Es la historia de un sueño que comenzó con una necesidad, pero que se consolidó gracias a la determinación de una mujer que nunca consideró rendirse. "Nunca pensé en desistir, aunque me tocara trabajar todo el día y la noche, porque veía que el negocio era muy bueno y crecía cada día más", afirma Lilia.Con el paso de los años, Lilia contó con la colaboración fundamental de su familia. Su hijo, al llegar a la adolescencia, se convirtió en un gran apoyo y con el tiempo fue tomando las riendas del negocio. "Le entregué todo a mi hijo porque con él la empresa creció mucho", asegura.Hoy en día, 'Masarepa Lilia' es un legado familiar que involucra no solo a sus hijos, sino también a sus nietos, quienes han heredado la pasión y el compromiso de su abuela. El crecimiento de 'Masarepa Lilia' ha sido posible gracias al respaldo de la Agencia de Empleo y Fomento Empresarial de Compensar, que a través de programas como Territorio Mipyme, ha impulsado esta empresa familiar hacia nuevos horizontes. Johanna Medina, líder administrativa y nieta de Lilia, resalta: "Las asesorías en producción y comercialización han sido clave para lograr avances significativos en nuestra productividad. Hemos incrementado hasta un 47% en algunos índices y expandido nuestra presencia a nuevos mercados".En los últimos dos años, el programa Territorio Mipyme de Compensar ha brindado apoyo a más de 2.200 micro, pequeñas y medianas empresas como la de Lilia y su familia.Actualmente, 'Masarepa Lilia' emplea casi a 30 personas y su presencia en el mercado ya completa 42 años. Pero más allá de los números, el verdadero éxito de Lilia es haber logrado que su esfuerzo y pasión por las arepas no solo alimentaran a miles, sino también sirviera de inspiración a muchos que, como ella, luchan por construir su propio camino.
Karsu intenta mantener la calma y confiar en Bora, quien niega rotundamente las acusaciones. Sin embargo, su suegra está decidida a hacerla sentir culpable. Ahora, todo parece encaminarse a resolverse en los tribunales.No te pierdas Karsu en las noches de Caracol Televisión o en la Señal En Vivo. Puedes revivir los capítulos aquí.
Por otra parte, Ümran sigue sospechando de la enfermera, quien posteriormente dice que necesita ayuda para cuidar de su hija. La mujer logra irse a solas con Elif y Firat, pero parece que tiene otras intenciones.No te pierdas los capítulos de La luz de mi vida en Caracol Televisión o en la Señal En Vivo.
El 12 de setiembre los colombianos pudieron disfrutar de la gran final de La Venganza de Analía 2 y durante 67 capítulos, en la historia se dieron giros inesperados para todos los personajes, los cuales complicaron la vida de su protagonista y mantuvieron en vilo a la audiencia.Mira también: Final de La Venganza de Analía: cómo quedaron Analía, Pablo y qué pasó con su hijaLa producción, protagonizada por Carolina Gómez, Marlon Moreno y Paola Turbay, congregó en promedio a más de 4 millones de personas.La Venganza de Analía 2En esa segunda temporada, Guillermo León Mejía, herido en su orgullo, logró salir de prisión y volvió a la política con un solo objetivo: vengarse de Analía y convertirse en presidente. Para detenerlo, Analía arriesgó su vida enfrentándose no solo a él, sino también a su nueva aliada, la implacable Paulina Peña. En aquel momento debió ser más astuta que nunca para proteger a los suyos y evitar que Mejía cumpliera su plan de destrucción y poder.Elenco de La Venganza de Analía 2 La venganza de Analía fue una serie producida por CMO para Caracol Televisión, dirigida por Camilo Vega y Mónica Botero. Fue escrita por Leonor Sardi y María Clara Torres, y contó con un gran reparto: Juliana Galvis, Andrea Gómez, Edwin Maya, Ana Wills, Helena Mallarino, Viviana Santos, Felipe Calero, Ana María Sánchez, Alejandro Gutiérrez, Manuel Prieto, entre otros.Qué pasó con Guillermo Mejía en La Venganza de Analía 2Guillermo se reunió con Peña para hacerle jurar que continuaría con su plan de venganza en contra de Guerrero. Allí mismo, la mujer le entregó unas ampolletas que contenían veneno, las cuales serían inyectadas a la estratega política. Durante el encuentro, Guillermo intentó atacar contra su hija; sin embargo, fue interrumpido por su yerno, quien le quitó la aguja de las manos y sostuvo con él una intensa pelea.Destruido por los golpes, Guillermo ejecutó su plan, pues decidió aplicarse él mismo la otra jeringa que tenía guardada en el bolsillo, acabando con su propia vida mientras Paulina observaba toda la escena a través del visor de su arma.“Le has hecho creer a todo el mundo, a todos los que quieres que los amas, pero tu única razón de existencia soy yo. Yo me pudro en el infierno, tú en vida”, fueron las últimas palabras que le dio a Analía.No te pierdas La Venganza de Analía 2 en las noches de Caracol Televisión o en la señal en vivo. Recuerda que puedes ver los capítulos aquí.
A Caracol Televisión llega La Influencer, la historia de Maritza Matallana, una joven creadora de contenido digital que encuentra el amor de manera inesperada mientras trabaja por su sueño de convertirse en una de las figuras más destacadas de las redes sociales. Te contamos en esta nota quiénes son los actores detrás de los personajes.Maritza es Mariana GómezMaría Isabel Matallana es una mujer popular que se siente orgullosa de serlo. Optimista y resiliente, nunca pierde la esperanza. A los 12 años, su madre la abandonó, y a pesar de su simpatía, ha lidiado con dislalia, un trastorno que afecta su pronunciación y le ha traído rechazos. Decidida a defender a quienes enfrentan problemas de comunicación y discriminación, utiliza sus redes sociales para abogar por la igualdad de oportunidades.Mira también: Mariana Gómez, de La influencer, confiesa los retos que tuvo para su protagónico: “No es común”Salvador Sarabia es Juan Manuel MendozaSalvador es la personificación de la elegancia y un diplomático nato. Siempre impecable en su vocabulario, trabajaba en Miami en la exitosa empresa de su novia Avril. La muerte de su padre lo obliga a regresar al país, donde descubre secretos familiares y la crisis que enfrenta la cadena de pizzerías Sarabia. Aldo, el mayor acreedor, prácticamente se queda con todo. Su padre, resistente a las nuevas tecnologías, permitió que el negocio se rezagara y por eso Salvador asume el reto de recuperar el legado familiar. Con un viejo local en un barrio popular, decide reconstruir la marca y competir en el mercado de comidas rápidas. Con la ayuda de Kike, su amigo de infancia remodela la sucursal para un relanzamiento. A pesar de los escasos recursos, está decidido a hacer lo necesario para sacar adelante su emprendimiento. Para reinventarse, debe incursionar en el mundo digital. La oportunidad llega cuando conoce a Maritza, una simpática influencer que le da el impulso que necesita.Avril Donado Mucci es Luna BaxterAvril es una mujer hermosa, elegante, ambiciosa, orgullosa, posesiva, clasista y multimillonaria. Su forma de hablar es particular, mezclando inglés y español. Lo ha tenido prácticamente todo en la vida sin esfuerzo, por lo que no sabe cómo manejar las pérdidas; nunca ha tenido que levantarse porque nunca se ha caído. Es visceral tanto en el odio como en el amor. Al inicio, es novia de Salvador, con quien comparte un apartamento en Miami. No soportaría perderlo, y mucho menos a manos de una mujer como Maritza, a quien considera insignificante.Germen es Edwin MayaGermán Hincapié es un influencer de dudosa reputación. Puede ser diplomático y encantador cuando lo desea, especialmente cuando lo necesita; sin embargo, en realidad es traicionero y manipulador. Su escasa ética y principios lo convierten en un enemigo implacable. No le importa hacer lo que sea para conseguir seguidores, ya que solo tiene un objetivo en la vida: ganar dinero y ser famoso.Aldo Suárez es Leonardo AcostaAldo Suárez es un elegante ejecutivo dueño de una inmensa fortuna, fruto de las múltiples empresas que ha logrado apropiarse mediante métodos ilícitos. Su imponente presencia, extraordinarios modales y su impecable forma de vestir le confieren un estatus de modelo a seguir para cualquier mortal. Por ambición, es capaz de traicionar incluso a sus mejores amigos, entre los que se contaba Miguel, el padre de Salvador. No dudó en engañarlo aprovechándose de Teresa, la esposa de Miguel, a quien enamoró con el único fin de lograr sus objetivos.Mira también: La verdad sobre cada personaje de La Influencer: esto le contaron a La RedTeresa de Sarabia es Marcela AgudeloTeresa de Sarabia es la madre de Salvador, una mujer de impecables modales y buenas maneras que oculta muchas insatisfacciones. Se casó muy joven con Miguel Sarabia, lo que le impidió vivir plenamente. Con el paso de los años, cometió el error de involucrarse con Aldo, de quien llegó a enamorarse sinceramente. Siempre ha sido una mujer imponente y elegante, por lo que considera que Maritza no es la mujer adecuada para su hijo. Su principal preocupación es el regreso de su hijo, ya que tiene muchos secretos que ocultar.Nibardo Matallana es Carlos CamachoEs el padre de Maritza. Durante toda su vida se ha dedicado a vender seguros de la vieja usanza, como visitador, con maletín y formularios en papel, viajando en autobús y a pie. Así ha intentado sostener a su familia, compuesta por Yesenia y sus tres hijos: Castor, Polo y María Isabel, Maritza. Aunque es responsable y trabajador, Nibardo no ha tenido mucho éxito. Además, es un poco inseguro, y a menudo le cuesta tomar decisiones para evitar conflictos. Por esta razón, flaquea ante sus hijos cuando debe ejercer autoridad, delegando esas funciones en su pareja.Mira también: Así se vivió el lanzamiento a medios de La influencer, la historia que llegará prontoFabricio Romero, Peluche es Camilo AmoresFabricio es el mejor amigo de Maritza. Es su confidente, su paño de lágrimas y también el amigo que la aterriza y reprende cuando es necesario. Es leal hasta la muerte con sus amigos y con todos en general. Aunque a veces le cuesta mantener la boca cerrada, no lo hace con mala intención. Es homosexual; algunas de sus actitudes, bastante sutiles, lo delatan, aunque no es algo de lo que se avergüence, a pesar de haber sido rechazado por su propia familia. Desde entonces, ha tenido que defenderse con los trabajos que consigue para sobrevivir. Asume con ironía sus desventuras y se esfuerza por ser responsable con las oportunidades que se le presentan.
Fabricio es el mejor amigo de Maritza. Es su confidente, su paño de lágrimas y también el amigo que la aterriza y reprende cuando es necesario. Es leal hasta la muerte con sus amigos y con todos en general. Aunque a veces le cuesta mantener la boca cerrada, no lo hace con mala intención. Es homosexual; algunas de sus actitudes, bastante sutiles, lo delatan, aunque no es algo de lo que se avergüence, a pesar de haber sido rechazado por su propia familia. Desde entonces, ha tenido que defenderse con los trabajos que consigue para sobrevivir. Asume con ironía sus desventuras y se esfuerza por ser responsable con las oportunidades que se le presentan.
Es el padre de Maritza. Durante toda su vida se ha dedicado a vender seguros de la vieja usanza, como visitador, con maletín y formularios en papel, viajando en autobús y a pie. Así ha intentado sostener a su familia, compuesta por Yesenia y sus tres hijos: Castor, Polo y María Isabel, Maritza. Aunque es responsable y trabajador, Nibardo no ha tenido mucho éxito. Además, es un poco inseguro, y a menudo le cuesta tomar decisiones para evitar conflictos. Por esta razón, flaquea ante sus hijos cuando debe ejercer autoridad, delegando esas funciones en su pareja.
Teresa de Sarabia es la madre de Salvador, una mujer de impecables modales y buenas maneras que oculta muchas insatisfacciones. Se casó muy joven con Miguel Sarabia, lo que le impidió vivir plenamente. Con el paso de los años, cometió el error de involucrarse con Aldo, de quien llegó a enamorarse sinceramente. Siempre ha sido una mujer imponente y elegante, por lo que considera que Maritza no es la mujer adecuada para su hijo. Su principal preocupación es el regreso de su hijo, ya que tiene muchos secretos que ocultar.
Aldo Suárez es un elegante ejecutivo dueño de una inmensa fortuna, fruto de las múltiples empresas que ha logrado apropiarse mediante métodos ilícitos. Su imponente presencia, extraordinarios modales y su impecable forma de vestir le confieren un estatus de modelo a seguir para cualquier mortal. Por ambición, es capaz de traicionar incluso a sus mejores amigos, entre los que se contaba Miguel, el padre de Salvador. No dudó en engañarlo aprovechándose de Teresa, la esposa de Miguel, a quien enamoró con el único fin de lograr sus objetivos.
Germán Hincapié uede ser diplomático y encantador cuando lo desea, especialmente cuando lo necesita; sin embargo, en realidad es traicionero y manipulador. Su escasa ética y principios lo convierten en un enemigo implacable. No le importa hacer lo que sea para conseguir seguidores, ya que solo tiene un objetivo en la vida: ganar dinero y ser famoso.
Una de las películas infantiles más recordadas de los años 90 e inicios de los 2000 es 'Casper', la cinta que narra la historia de un amor imposible entre una niña y un fantasma que termina tomando su forma humana por un par de horas. Esta producción fue protagonizada por el actor canadiense Devon Sawa, quien se convirtió en el amor platónico de muchos televidentes durante el lanzamiento y la época en que este proyecto fue exitoso.Mira también: Así luce la hija de Mauro Urquijo y Adriana López; en 2013 contó que hizo transición de géneroSawa es un destacado actor nacido el 7 de septiembre de 1978, por lo que a la fecha (2025) tiene 47 años y una extensa trayectoria en el mundo cinematográfico, pues ha tenido la posibilidad de participar en otras películas de la talla de 'Destino final' (en dos entregas), 'Conspiración explosiva', 'Jóvenes aventurero' y 'Los pequeños gigantes'. Años después, se convirtió en una de las figuras más recordadas en la escena musical al participar en el video de 'Stan', una de las canciones más famosas de Eminem. Mira acá el clip:En su cuenta oficial de Instagram recoge casi 400 mil seguidores, a los que no duda en mostrarles cómo es su preparación para cada personaje y el detrás de cámaras de algunas escenas. De hecho, en varias oportunidades ha aceptado colaboraciones en donde hacen referencia a su papel de Casper en la película infantil, demostrando de esta forma que no le molesta que aún lo recuerden por esta interpretación que hizo cuando tan solo era un niño. Mira también: Así luce el protagonista de 'José, los sueños del faraón' 30 años despuésDevon también ha sido muy sincero respecto a las películas de acción que ha hecho, pues ha contado con el apoyo de dobles de acción para poder ejecutar algunas escenas que pueden llegar a ser riesgosas. En 2010 se casó con Dawni Sahanovitch y tuvo dos hijos, desde allí su vida ha estado enfocada mayormente en su rol como padre de familia, aunque no ha dejado cien por ciento su trabajo en las artes escénicas. En redes sociales acostumbra a presumir su vida familiar y los recuerdos que tiene acerca de sus años dorados en el cine, recibiendo a diario múltiples mensajes de admiración por parte de sus seguidores. Mira también: Así luce la nueva Miss Universo sin maquillaje: Usuarios la comparan con otra candidatas
Mientras tanto, Grazzia se entera del compromiso y se propone arruinarlo sin importarle las consecuencias. Valentina todavía tiene dudas sobre su prometido, pero sabe que no podría regresar con Luis Miguel y tampoco perdonarlo por todo lo que le hizo.No te pierdas La Venganza en las mañanas de Caracol Televisión o en la Señal En Vivo. Mira los capítulos aquí.
Cami y Sathya han sido algunas de las Súper Humanas del Desafío del Siglo XXI que han demostrado que no tienen una buena relación debido a los roces que llegaron a presentar en la competencia. A inicios de septiembre, la exintegrante de Omega le hizo una invitación a la excapitana de Alpha para que se enfrentaran en un ring de boxeo y, aunque esto parecía un encuentro alejado, finalmente tuvo lugar el pasado15 de septiembre en pleno programa transmitido en ditu. Mira también: Sebastián Martino confiesa cuál fue el Desafio más difícil de hacer: estos fueron los motivosSin embargo, no se trató de una pelea de boxeo, sino de un verdadero desafío. Las jóvenes se vistieron como todas unas boxeadoras y pusieron a prueba sus habilidades para desarrollar actividades incluso cuando tenían las manos completamente ocupadas. Durante el primer round, ambas tuvieron que pelar la mayor cantidad de bananos mientras llevaban puestos unos enormes guantes, actividad que dejó como vencedora a Sathya luego de que hiciera una remontada que tomó por sorpresa a su contrincante. A pesar de su derrota, Cami no desaprovechó la oportunidad para enviarle una indirecta a su compañera: "Cuando no es tan maduro es duro duro de entender", expresó. En el segundo round, la nutricionista se desquitó, pues logró cumplir con el reto en la menor cantidad de tiempo posible. Allí, básicamente debían enhebrar una enorme aguja mientras llevaban también unos guantes, pero esta vez en tamaño normal. La joven logró conseguir la victoria gracias a la técnica que utilizó, demostrando de esta forma que también se considera una jugadora fuerte. Mira también: Gero, del Desafío, se sincera sobre la presión que siente al ser hijo de Juan Pablo ÁngelLas reacciones ante este enfrentamiento deportivo no se hicieron esperar, pues muchos usuarios de Internet tomaron el hecho con buen sentido del humor: "Se ven maravillosas las dos", "Cuando hablaban de ir a los guantes pensé que se iban a dar en la cara", son algunos de los mensajes que se destacan. La rivalidad entre ambas inició luego de que Sathya asegurara en El Cubo de Eliminados que Cami no quería que ella regresara del Desafío a Muerte. Al salir de La Ciudad de las Cajas, la joven la desmintió y aseguró que la consideraba como una mujer fuerte, añadiendo que esa fue la razón por la cuál la eligió para integrar la escuadra morada. Mira también: Juan Pablo Ángel finalmente se pronunció sobre la eliminación de Gero del DesafíoNo te pierdas los capítulos del Desafío del Siglo XXI en las noches de Caracol Televisión o a través de nuestra señal en vivo, conéctate de lunes a viernes a las 8:00 p.m. Síguenos en nuestro canal de difusión de WhatsApp.