Jennifer Lawrence posee un encanto 'universal'

Nadie puede acusar a la actriz Jennifer Lawrence de ser únicamente una cara bonita, ya que los propios productores de la saga 'Los juegos del hambre' están convencidos de que gran parte del éxito comercial de las películas se debe a la profundidad de la que la joven es capaz de dotar a sus personajes, haciendo que cualquiera pueda identificarse con ellos.

"Las múltiples cualidades de Jennifer como actriz y la profundidad que posee atraen a todo el mundo. Da igual que tengas 15 o 50 años, sientes lo mismo hacia ella. Puede que estés viviendo tu primer amor o que lleves 25 años con la misma persona, todavía conectarás con la difícil situación que vive Katniss [personaje de Jennifer] al ser empujada en distintas direcciones [en referencia al triángulo amoroso que vive con su amigo de la infancia Gale y su compañero en los juegos Peeta]", aseguró Nina Jacobson, productora de las cintas, a la revista SFX.

Pese a estar basada en una serie de novelas juveniles, los creadores de la adaptación cinematográfica han intentado no caer en el error de convertir la historia en un cliché para adolescentes, prefiriendo apostar por dirigirse también a unos espectadores más adultos.

"Estamos haciendo las películas para que resulten tan enriquecedoras e interesantes para una audiencia adulta como lo eran para los lectores adolescentes que las hicieron tan populares", añadió.

Por otra parte, la decisión de los productores de dividir la última entrega de la saga, 'Los juegos del hambre: Sinsajo', en dos partes responde no a una intención de aumentar la recaudación en taquilla, sino a la necesidad natural de separar dos historias distintas en argumento y tono.

"Definitivamente hay un montón de arcos argumentales a lo largo de la serie, pero hay dos historias muy diferenciadas en 'Sinsajo'. Sabíamos que había dos historias distintas que podíamos contar, así que se trataba solamente de ver dónde estaba el final de la historia de la 'Parte 1' propiamente dicho", concluyó.