Aunque el incombustible Keith Richards sigue igual de activo que siempre en lo que a su carrera profesional se refiere, grabando discos con los Rolling Stones y saliendo constantemente de gira, en la actualidad su vida personal transcurre de forma mucho más tranquila y apacible que en aquellos años marcados por sus presencia en toda clase de caóticas fiestas, en las que el consumo descontrolado de alcohol y drogas era sin duda la tónica.
Pero el propio músico acaba de reconocer que si ha acabado sentando cabeza en ese sentido -y a sus 74 años- no ha sido tanto por necesidad o por gusto, sino más bien porque ha perdido por completo el interés en las sustancias estupefacientes debido a lo "aburridas y flojas" que, en su opinión, se han vuelto con el paso de los tiempos.
"Las drogas que hay hoy en día por ahí no me fascinan lo más mínimo, se han convertido en algo institucionalizado, son aburridas y muy flojas. Además, he probado de todo en la vida, ya no hay nada que me pueda sorprender", ha confesado en conversación con el diario británico The Daily Telegraph para, a continuación, negarse a descartar del todo la posibilidad de que vuelva a recuperar sus viejos hábitos.
"Ahora mismo mis únicos vicios son el tabaco y el café, pero no puedo decir que me haya librado definitivamente de esas cosas. Quizá en seis meses lo retome, pero de momento no he tocado nada de eso. Es toda una novedad para mí", ha bromeado.
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Por otro lado, el carismático y polémico artista ha querido aprovechar la coyuntura para reflexionar precisamente sobre los efectos positivos que, en dosis moderadas y de forma ocasional, puede provocar una ligera intoxicación a la hora de estimular la creatividad y el ingenio de los artistas.
"Bueno... Todo en la vida es relativo. La falta de sobriedad puede dar como resultado todo tipo de cosas maravillosas", ha aseverado en la misma entrevista.
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Por: Bang Showbiz