Tras el suicidio de su madre, Kerim fue adoptado por su tía Meryem y trabaja como herrero para ganarse la vida.
Con motivo al matrimonio de Selim, uno de sus amigos de la clase alta, Kerim se reúne con un grupo de jóvenes para celebrar y terminan borrachos y drogados. En ese estado, juntos abusan de Fatmagül.
Aunque Kerim se eche la culpa, él es el único que no participó en la violación, pero asume toda la responsabilidad para salvar a sus amigos, y decide proponerle matrimonio a Fatmagül, quien buscará la forma de vengarse.