No han pasado ni 24 horas desde que saltara la noticia de que la actriz Zoe Saldaña estaría embarazada de tres meses, pero en vez de salir a la palestra para aclarar si son ciertas las especulaciones que han ido surgiendo sobre su supuesta aventura maternal, la famosa artista ha preferido compartir con los medios otra anécdota igual de impactante sobre los entresijos de su vida personal: concretamente, el hecho de que solo le llevó tres semanas planificar su boda con Marco Perego, escasos meses después de iniciar su relación sentimental.
"La verdad es que con Marco todo ocurrió muy rápido. Nos conocimos de casualidad, nos enamoramos perdidamente y en pocos meses decidimos casarnos. No estábamos dispuestos a esperar mucho, así que lo planeamos en unas tres semanas aproximadamente y avisamos a todo el mundo con muy poco tiempo de antelación. Fue todo muy, muy rápido", confesó la estrella de cine en conversación con el portal The Hollywood Reporter.
Pese a haber ignorado por completo la delicada cuestión del primer hijo que estaría esperando con su marido, la intérprete de origen caribeño deja entrever con sus anteriores declaraciones que no le tiembla el pulso a la hora de llevar su vínculo sentimental a un plano más serio cada vez que lo demanda la situación, una actitud que probablemente intensificará las especulaciones sobre una hipotética maternidad que, si resulta ser cierta, se explicaría por la "conexión total" que Zoe mantiene con el hombre de su vida.
"Antes de conocernos personalmente, yo ya sabía quién era Marco Perego porque había visto algunos ejemplos de su trabajo. De hecho, cuando empezamos a salir, yo ya tenía la impresión de que llevábamos juntos mucho más tiempo al estar totalmente familiarizada con su carrera. Por eso no tuve que pensarlo demasiado cuando me propuso matrimonio, la conexión total que caracterizaba nuestra relación era una prueba más que palpable de que teníamos que convertirnos en marido y mujer", apuntó en la misma entrevista.
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