El nieto díscolo de la reina Isabel II todavía tiene en el recuerdo la fatídica visita que hizo en 2012 a la ciudad de Las Vegas junto a un grupo de amigos, una estancia de la que los tabloides británicos dieron buena cuenta al publicar varias imágenes filtradas que exhibían al joven príncipe completamente desnudo y divirtiéndose con varias chicas tan ligeras de ropa como él.
Después de enfrentarse a las consecuencias de semejante experiencia, no resulta extraño que Enrique de Inglaterra esté pensando seriamente si asistir o no a la boda del cantante James Blunt -contraerá matrimonio con Sofia Wellesley, nieta del actual duque de Wellington- que tendrá lugar dentro de unos meses en la isla de Ibiza, ya que ni él ni su círculo de protección real están seguros de poder mantener intacta la privacidad del encuentro y, ante todo, evitar que el hijo de Diana de Gales acabe dando rienda suelta a sus instintos más lúdicos y al mismo tiempo problemáticos.
"En otras circunstancias Enrique no se perdería la boda de James por nada del mundo, es uno de sus mejores amigos y le quiere como a un hermano. Pero lo cierto es que todavía no ha confirmado su asistencia y es posible que al final no lo haga. Sabe que los otros amigos de James ya están preparando todo tipo de fiestas salvajes en Ibiza para los días anteriores a la boda, fiestas que jamás evitaría si no fuera porque es posible que se acaben haciendo públicos algunos momentos comprometedores", reveló una fuente al diario The Sun.
"Ni Enrique ni los encargados de velar por su seguridad están dispuestos a vivir lo mismo que hace dos años tras su desastroso viaje a Las Vegas. El revuelo que causaron esas fotos todavía resuena en palacio y le ha puesto en más de una situación incómoda con la familia real", añadió el mismo informante.
Publicidad
Mientras que James Blunt espera pacientemente la respuesta de su pelirrojo amigo, las princesas Beatriz y Eugenia -hijas del príncipe Andrés y Sarah Ferguson- no parecen tan preocupadas por los hipotéticos efectos de su exposición pública al haber aceptado rápidamente la invitación del artista, quien también distribuirá a otras estrellas en diferentes mansiones repartidas por toda la geografía ibicenca, celebridades tan variadas como Elton John, Jude Law o Guy Pelly -amigo personal del príncipe Guillermo, del que no se prevé su asistencia.