El actor Daniel Radcliffe preferiría no haber hablado nunca públicamente de sus problemas pasados con el alcohol, a los que decidió enfrentarse para ponerles punto final tras vivir una experiencia aterradora.
"Fue un error hablar de esa historia con los periodistas. Es algo que sucede cuando no tienes experiencia con los medios. Hablas de cosas que deberías guardarte para ti mismo. En 2010 me dio una lipotimia tan fuerte que dejé de beber de inmediato. Imagínate si los paparazzi me hubiesen sacado fotos en aquella situación. Pero por suerte no lo hicieron", explica el intérprete en una entrevista a la edición alemana de la revista GQ.
A pesar de que su fama le obligó a lidiar con su alcoholismo bajo el escrutinio de la opinión pública, Daniel no se arrepiente de haber tomado la decisión de ser actor porque adora su trabajo.
"No me arrepiento de nada, gracias a Dios. La interpretación no podría haber sido mejor para mí. No hay nada que me guste hacer más que mi trabajo. Para mí no resulta un esfuerzo. Hacer cien entrevistas al día puede resultar estresante, pero es parte de todo esto", añade.
Publicidad
A diferencia de otras estrellas infantiles, Daniel no se sentía abrumado por su trabajo en la saga de 'Harry Potter', en la que obtuvo el papel protagonista con 10 años.
"Nunca me resultó estresante. Quería trabajar. Para relajarme escuchaba a los Sex Pistols y a New York Dolls."
Publicidad