Gertrudis no quiere que su más oscuro secreto salga a la luz y, mucho menos, que sea conocido por Tiburcio y Felicito. Así que encuentra la mejor opción en que su hijo viaje a Bogotá para trabajar con Armida y así Albeiro no tenga oportunidades de contactarlo.
Para eso, Gertrudis le advierte a Albeiro que no responderá si vuelve a acercarse a ella o a su familia y rompe el celular de Tiburcio para que no haya posibilidad de un nuevo contacto.