Después de conocer al futbolista Gerard Piqué durante el Mundial de Sudáfrica en 2010, la cantante Shakira puso punto final a su existencia errante para establecerse en Barcelona, el lugar donde nació su primer hijo Milan (23 meses) y que ella asocia irremediablemente al olor de su pareja.
"[Para mí] Barcelona huele a Gerard", bromeó la colombiana durante un encuentro con varias bloggers de moda para promocionar su nuevo perfume 'Rock'.
Pese a lo bien que se ha adaptado a su nueva vida en la Ciudad Condal -donde presumiblemente vendrá al mundo el que será su segundo hijo junto al delantero catalán-, Shakira intenta no perder el contacto con sus raíces colombianas manteniendo algunas de las costumbres de su infancia, incluyendo el andar descalza siempre que tiene la oportunidad.
"Eso me recuerda a mis orígenes, de dónde vengo. Barranquilla es una ciudad de la costa atlántica de Colombia, mi país. Es el Caribe puro y duro, y ahí andamos descalzos. O al menos yo sí lo hacía", añadió la artista.
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Aunque la propia cantante ha reconocido anteriormente que su hijo Milan ha heredado su aversión a los zapatos, por el momento parece que el pequeño hace gala de algunos de los rasgos más característicos tanto de su madre como de su padre.
"A Milan le gusta mucho aprender, en eso es como la mami. Pero también tiene muchas cosas del papi: es alegre y divertido. ¡Tan pequeñito y ya es un bromista! Además es sensible y perceptivo como su papá, que se da cuenta de unas cosas... A veces parece que Gerard tiene cinco ojos, yo le digo que es como un águila. Así como es en el campo, que lo mira y lo ve todo, así es en la vida. Y Milan es igual, de bebé se fijaba en un avión a kilómetros de distancia. Tiene una visión muy aguda, unos sentidos muy agudos en general, como su padre", explicaba recientemente la cantante en la edición española de la revista ELLE.
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