El actor Mark Wahlberg se ha convertido con el paso de las décadas en una de las estrellas más destacadas del firmamento hollywoodiense, pero también en un ciudadano modélico que ha logrado enterrar para siempre aquellos caóticos años de juventud en los que protagonizó algún que otro violento encontronazo con la autoridad.
Tanto es así, que hace dos años el intérprete solicitó ante el gobierno estatal de Massachusetts un indulto oficial que, pese a su escasa utilidad legal, sirviera como prueba fehaciente de que su carácter ejemplar de hoy en día nada tenía que ver con la de aquel chico que, en el año 1988 y con solo 16 años, fue condenado a dos años de estancia en una cárcel para adultos -de los que solo cumplió 45 días- por golpear al dependiente de una tienda en la cabeza para robar alcohol en el establecimiento.
Sin embargo, y como ahora ha confirmado la Junta de Libertad Condicional del estado de Massachusetts al diario The New York Post, el intérprete parece haber cambiado de opinión al respecto y, en consecuencia, el caso ha sido cerrado por el citado organismo al "no haber recibido respuesta" del artista sobre si quería renovar la petición para poder ser tramitada este mismo año.
Aunque se desconocen las razones por las que Mark Wahlberg ha dejado de lado sus intentos de redimirse de su oscuro pasado ante la opinión pública, ya sea por la lentitud de los procedimientos administrativos o por la falta de tiempo que se desprende de sus compromisos profesionales, lo cierto es que el año pasado el astro de Hollywood insistía en que el indulto era importante para certificar que estaba completamente "rehabilitado".
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"Esta ha sido mi vida durante los últimos 27 años, y es con la que realmente me identifico. Algunos dirán que como soy famoso, puedo tener ese tipo de privilegios legales, pero no es por eso. Esta es mi vida, y la historia no ha cambiado. Llevo muchos años ya siendo esa persona que nada tiene que ver con el adolescente conflictivo", explicaba al diario The Times para justificar su decisión de solicitar el indulto.
En la actualidad, además de protagonizar innumerables éxitos de taquilla, Mark Wahlberg -padre de cuatro hijos con su mujer Rhea Durham- aprovecha sus escasos ratos libres para colaborar con una asociación católica que ayuda a jóvenes en riesgo de exclusión a enderezar su rumbo, así como a echar una mano a viejos amigos que atraviesan una mala racha a nivel personal.
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