La llegada de su primera hija junto a su mujer Águeda López logró obrar un milagro en el cantante Luis Fonsi al conseguir que redujese su frenética actividad laboral para centrarse por encima de todo en ser un padre presente y atento con su pequeña Mikaela (2), a quien a día de hoy es capaz de cambiarle los pañales o prepararle la comida con mucha soltura.
"Lo ha hecho más humano, muy consentidor, muy paciente y ha conseguido que se relaje. Fonsi es una persona hiperactiva. Siempre está haciendo cosas, está de un lado para otro, y con Mikaela él se toma su tiempo, juega con ella. Si le tiene que hacer la comida porque yo estoy trabajando, le cocina. Le cambia los pañales, la enseña y la educa. Ha sido una bendición para los dos", aseguró la mujer del portorriqueño, Águeda López, a la revista People En Español.
Pero la vida del artista portorriqueño no es la única que ha sufrido un cambio radical desde que Mikaela llegase al mundo, ya que la modelo española ha adoptado una postura mucho más defensiva tras convertirse en madre debido al miedo que le provoca que los "comentarios ofensivos" de algunas personas puedan herir a su hija.
"Cuando intento proteger a mi hija, la gente puede pensar: '¿Pero quién se cree que es ella? ¿Quién se cree que es su hija?'. No es por ese tema, es porque a veces la gente es un poquito cruel y yo no quiero que le hagan daño a mi hija. Mi hija es mi tesoro y no quiero que nadie la toque. Si alguien la toca, entonces me sale la leona. Y si puedo protegerla de críticas y comentarios ofensivos, lo voy a hacer", añadió.
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