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El rapero Safaree Samuels acaba de borrar de su vida el último rastro de la relación sentimental de 14 años que mantuvo con Nicki Minaj hasta el año pasado haciéndose tatuar un diseño de rosas sobre el retrato de la cantante caracterizada como Marilyn Monroe que hasta ahora lucía en su brazo.
El artista encargado de tapar el tatuaje en homenaje a Nicki, que responde al nombre de Compton, ha tenido el bonito detalle de pedirle perdón a través de las redes sociales asegurándole que es solo cuestión de negocios.
"Y vosotros creéis que vuestro trabajo es duro. Acabo de terminar esta pieza para Safaree. Lo siento Nicki, es solo trabajo", afirmó el tatuador en su cuenta de Instagram junto a una foto del resultado final de su trabajo.
En 2014 Safaree ya se tapó los tatuajes que tenía en los pectorales con la cara y el nombre Nicki haciendo que le tatuaran un casco de moto y una rosa con un candado encima de ellos.
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La decisión de Safaree de deshacerse del último recuerdo de Nicki de su piel llega después de que la intérprete decidiera supuestamente poner punto final a su rumoreado compromiso y a su relación con su pareja, Meek Mill, porque criticó públicamente a su amigo Drake acusándole de no escribir la letra de sus canciones.
"Es todo muy complicado. Creo que su relación avanzó demasiado rápido y que llegó demasiado lejos", aseguraba una fuente al portal MediaTakeOut.
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Por el momento tanto Nicki como Meek siguen de gira juntos y actuaron este martes en el club People By Crystal de Dubái.
"Los dos planean cumplir con el resto de sus compromisos de la gira", añadía el mismo informante.
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