Uno de los secretos de Dascha Polanco para contrarrestar los excesos navideños una vez concluida la época festiva es someterse a un tratamiento de hidroterapia de colón que consigue hacerle sentirse "más ligera y limpia".
"No es algo que haga todo el tiempo, más bien cada estación. Me gusta ir a un sitio en concreto -My Wellness Solutions en Harlem (Nueva York)- porque es muy privado y está muy limpio. Y el ambiente es muy relajante, muy agradable. Antes de acudir allí ya había probado otro lugar que tenía un aspecto muy industrial. Pensé: 'Ummmm, no me siento cómoda haciendo ca*a aquí'. Me sentía muy expuesta", explicó la intérprete en una entrevista a la revista The Cut, donde reveló las ventajas de este tipo de terapia: "Te sientes más ligera y limpia".
Además, Dascha también ha adquirido la costumbre de acudir religiosamente al gimnasio junto a su actual pareja, que es "modelo de fitness", aunque en ocasiones le cueste un mundo.
"Hay momentos en los que entreno cinco, seis o siete veces por semana. Pero también hay épocas en las que entreno tres días. La mayor parte del año pasado tuve lo que yo llamo una recaída durante la que no fui al gimnasio aunque sabía que debía ir. Empecé a acudir otra vez en septiembre, y desde entonces me lo he tomado muy en serio", añadió.
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Sin embargo, todavía hay ciertos malos hábitos de los que la actriz no ha podido desprenderse, como por ejemplo el dormir poco. Y es que, aunque la mayoría de sus compañeras de profesión afirman vehementemente que una buena noche de sueño es el mejor secreto de belleza, a Dascha le resulta imposible compatibilizar su papel de madre de tres niños con dormir ocho horas cada noche.
"En realidad, no duermo demasiado. Generalmente me despierto a las seis de la mañana porque tengo que llevar a mis hijos al colegio: me gusta que desayunen allí porque la comida es mucho más equilibrada".
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