Katy Perry ha vuelto a sacar su lado de adolescente en plena crisis emo, sin olvidarse la chupa de cuero y el gorrito de lana hasta en pleno verano. A estas alturas, ya no sabemos si la pose es la imagen dulce que la cantante ofrece sobre el escenario, o este lado más oscuro y depresivo que le gusta lucir cuando va de incógnito.
Actualizado: febrero 05, 2016 06:57 p. m.