A pesar de los pequeños conflictos que fueron erosionando en los últimos años el matrimonio entre Will Smith y su mujer, la también actriz Jada Pinkett Smith, lo cierto es que en la actualidad los dos enamorados han sabido poner tierra de por medio, superar las adversidades, y retomar con la intensidad de antaño el profundo vínculo que existe entre ellos. Tanto es así, que ahora resulta comprensible que Jada afirme orgullosa que sigue tan enamorada de su marido como en los mejores años de su romance.
"Para mí Will encarna todo lo que necesito en un hombre, en un compañero de vida al que agarrar de la mano hasta el final de mis días. Realmente creo que la palabra 'marido' no representa por completo la importancia que tiene para mí y el hecho de que es una persona imprescindible en mi existencia. Ahora mismo puedo decir que estoy tan enamorada de él como el día en que nos casamos, y eso que hemos atravesado todo tipo de contratiempos", se sinceró a la revista The Edit.
Una de las razones que explican por qué Will y Jada han sido capaces de redefinir los términos de su romance y comenzar una nueva etapa alejada de experiencias pasadas tiene que ver con un profundo cambio de mentalidad en la intérprete, quien ha entendido con el tiempo que la vida matrimonial debe tener un punto de flexibilidad para resultar satisfactoria y, sobre todo, que no todos los aspectos de una relación pueden ser controlados de manera férrea.
"Solía tener una visión muy cerrada y limitada de lo que suponía estar casada, del papel que tenían que jugar el marido y la mujer en la convivencia diaria. Si de algo me alegro después de haber tenido algún que otro momento dramático en nuestra relación, es de haber podido evolucionar gracias a ello. Ahora soy menos intransigente y he aprendido a disfrutar más de los momentos de espontaneidad", aseveró en la misma conversación, antes de zanjar definitivamente los rumores de que, junto a su famoso marido, ha estado dispuesta a relacionarse con otras parejas en la intimidad del dormitorio.
Publicidad
"No entiendo por qué ese tipo de noticias absurdas e inventadas acaban llegando a los medios de comunicación. La verdad es que no me molesta mucho, sino que me hace reír a carcajadas, pero a veces me resulta muy incómodo tener que defenderme de acusaciones que no tienen ningún fundamento", apuntó.