De hecho, la estadounidense revela que si pudiera cambiar algo de su cuerpo, le gustaría poder llegar a la talla 90 de sujetador.
"No cambiaría nada de mí. No porque piense que soy guapa, sino porque creo que soy así por alguna razón. Aunque no me importaría tener los pechos más grandes", comentó la intérprete a la revista Tatler.
La estrella de Hollywood, que no duda en subrayar su satisfacción general por su silueta, está sin embargo algo preocupada por su convencimiento de que algunos de sus rasgos físicos están cambiando irremediablemente.
"Suelo darme cuenta cuando alguno de mis atributos físicos ya no es el que era y ha dejado de gustarme. Creo que mis ojos son demasiado pequeños y tengo la paranoia de que mi nariz está creciendo", indicó al mismo medio.
Por otro lado, Gwyneth confiesa haber iniciado sesiones de yoga aéreo --una variante del yoga con la que sus participantes se cuelgan del techo-- y justifica tal decisión aludiendo a la curiosidad que siempre ha sentido por la sensación de estar suspendida en el aire.
"El profesor viene con algo parecido a una hamaca y la cuelga del techo. Solo tengo que saltar sobre ella y balancearme como si fuera un murciélago", comentó.
Por: Bang showbiz