Ser parte del elenco es una bendición para este humorista, quien con Sábados Felices ha podido conocer personas y culturas en el extranjero. Por eso en uno de sus viajes se sintió como en casa, algo que dejó una grata huella en él. Al estar en Guayaquil, Ecuador, el comediante fue recibido con una gran amabilidad, pues las personas le demostraron su cariño y admiración, por lo que asegura que logró que se identificaran con su show.
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