Lorna habla con Eli y le pide que no eche su vida a perder, es una mujer trabajadora con estudios que no merece estar trabajando en la cevichería después de estar ejerciendo su carrera como enfermera en la clínica.
La costeña la escucha y decide hacerle caso, se arma de valor y llama a Majo para pedirle empleo en la clínica de Barranquilla, sin ningún reparo ella le dice que sí. En su primer día, la costeña llega con mucha fuerza y enfrenta a todos sus compañeros, les confirma que la dejaron plantada en el altar, que ha llorado mucho, pero que ya es tiempo de superarlo.
Todos quedan callados y Bony no pude ocultar su sorpresa, la costeña llegó renovada y con mucha fuerza a la clínica para rehacer su vida.