Una cosa es querer marcar curvas y otra muy distinta es casi perder el conocimiento por la presión que el vestido ejerce sobre ti. Eso es lo que le pasó a Nicki Minaj, que bien podría haber perdido el sentido en cualquier momento de lo apretado que le quedaba su vestido, que además tenía un peculiar escote.
Actualizado: febrero 05, 2016 06:08 p. m.