La princesa Eugenia planea dejar su trabajo en NY para apoyar a su padre en Reino Unido

La princesa Eugenia, hija del príncipe Andrés, estaría pensando en pedir permiso a su empresa -la casa de subastas online Paddle8- para dejar temporalmente su trabajo en Nueva York y volver a Reino Unido para estar al lado de su padre, quien ha sido acusado de mantener relaciones sexuales con una joven de 17 años. "Todo esto ha afectado mucho a Andrés. Mucho más de lo que la gente piensa. Eugenia está muy preocupada por él. No puede soportar verlo mal. Quiere estar ahí para abrazarle y animarle", contó una fuente al británico Express. Quien también está apoyando incondicionalmente a Andrés es su exmujer Sarah Ferguson, quien sería la clave que probaría la inocencia del hijo de la reina Isabel II. Según Virginia Roberts, la joven que le acusa, una de las tres veces que mantuvo relaciones con el príncipe en 2001 fue durante una sesión de sexo grupal con otras ocho chicas en el domicilio de Jeffrey Epstein, amigo de Andrés, en las Islas Vírgenes. Viajes de los que tendría pruebas físicas que confirmarían que voló allí durante la Pascua de ese año. Sin embargo, Andrés habría estado con Sara y sus hijas Eugenia y Beatriz en esos días en las Bahamas, a 90 minutos de vuelo de donde Roberts le ubica. Y aunque el palacio de Buckingham -quien ha negado, en nombre del príncipe, las acusaciones- no ha ofrecido datos de sus movimientos, Sara podría probar que estuvo con ella todo el tiempo. "Si Fergie -nombre con el que se conoce a la duquesa de York- está segura de que su exmarido estuvo con ella durante todo el tiempo en las Bahamas y no cogió un vuelo a las Islas Vírgenes podría parar esta pesadilla. Hay registros de sus movimientos porque él y las niñas habrán tenido personas de seguridad acompañándoles", contó una fuente al citado diario. El pasado jueves, Andrés habló públicamente por primera vez, en el Foro Económico Mundial en Suiza, sobre las acusaciones, diciendo que quería "reafirmar" lo ya dicho en el comunicado del palacio de Buckingham, que todo era "categóricamente falso". Por su parte, Sarah ha defendido también a su marido diciendo que es un "buen hombre" y que las acusaciones son "mentiras".