Cuando creíamos que Katie Holmes por fin había superado su obsesión por vestirse de catequista, ella va y nos sorprende rescatando ese jersey del fondo de su armario. Tampoco es cuestión de que se convierta en todo un icono de estilo -que sabemos que no puede-, pero podría intentar comprar su ropa en la sección de adultos y no en la de adolescentes modositas.
Actualizado: febrero 05, 2016 06:35 p. m.