Por una decisión caprichosa e inmadura de María José, Alejandro tuvo que romperle el corazón y dejar plantada en el altar a su amada Eli. Justo después de finalizar el compromiso fue a hablar con su exnovia y se dio cuenta que tiene serios problemas mentales.
Ella tuvo el descaro de pedirle que volvieran a estar juntos en una relación sólida para finalmente casarse, Alejo no lo soportó y se fue a un bar a ahogar sus penas en el alcohol, aprovechó para enviarle una carta a todos para que no se preocuparan por él mientras está ausente.
El cachaco se fue a una casa de retiro para encontrar su paz interior, allí estará alejado de todas la comunicaciones y el internet. Empezará a hacer labores agrícolas.
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