Tras día y medio de estar desaparecida Heily García, apareció muerta envuelta en una bolsa plástica. No se sabía nada de su cuarta hija, la mejor, con con solo doce días de nacida.
El cuerpo presentaba signos de violencia en cuello y su rostro, pero estaba totalmente vestida por lo que se descartó acceso carnal.
Al principio, todo indicaba que se trataba de un crimen pasional, pero un hallazgo en un basurero cambió el rumbo del caso.